Tamales, pan, dulces, y más, son algunos de los platillos que se ofrendan para celebrar la festividad de Día de Muertos, el 1 y 2 de noviembre, esto se hace con el objetivo de recordar su vida disfrutando de un rico platillo tradicional.
La palabra tamal viene del náhuatl tamalli, que significa envuelto; el origen de este alimento se disputa entre varios países de América, ya que diversas variedades de tamales han sido desarrolladas en casi todos los países del continente americano, especialmente en México, Perú, Argentina, Chile, Bolivia, los países de Centroamérica y otros países más.
¿Quieres hacer algo rápido y sencillo? Aquí te decimos:
TAMALES DE CHOCOLATE
- Remoja las hojas de maíz en agua caliente hasta que estén blandas.
- Corta el chocolate solido en trozos y muélelo.
- Bate mantequilla y el azúcar con una batidora, agrega el chocolate molido, canela, polvos para hornear y la sal. Agrega la masa instantánea y la leche, bate de nuevo.
- Coloca la otra mitad de la masa y el agua y remueve hasta tener la consistencia de una masa del pastel un poco espesa. Si es necesario, añade más agua.
- Llena la vaporera con agua sin que toque la rejilla. Cúbrela con hojas de maíz.
- Coloca sobre cada hoja dos o tres cucharadas de la masa. Al momento de que el agua comience a hervir, disminuye el fuego y deja por 40 minutos, hasta que la hoja se desprenda del tamal. Reposa la olla tapada aproximadamente 10 minutos antes de servir.
TAMALES VERDES DE POLLO
- Cuece los tomates con la cebolla y el ajo. Licúalos con el cilantro y los chiles. Vacíalos en una olla, agrega el pollo y hierve por cinco minutos.
- Calienta las hojas de plátano o maiz, puedes hacerlo en el microondas, hasta que estén blandas.
- Bate manteca, Incorpora el caldo, el agua, la sal y la masa, sigue batiendo hasta mezclar perfectamente
- Pon la hoja de plátano o maiz con la parte brillante hacia arriba y un poco de masa en el centro, en este mismo añade una cucharada del pollo guisado. Cierra cada tamal.
- Coloca los tamales verticalmente en la vaporera. Cúbrelos con una toalla de cocina limpia y tapa. Déjalos a fuego medio por una hora.
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