Tener una mascota en casa es una de las mejores cosas que nos pueden pasar en la vida. Sin embargo, ser dueños de un perrito o de un gatito, aunque es una experiencia muy bonita, también nos exige algo de responsabilidad en la higiene, porque muchas veces su piel y pelaje albergan bacterias y parásitos dañinos no sólo para ellos, sino también para quienes los rodean.
¿Sabes cómo bañarlos? aquí te decimos:
- Para empezar, dale a tu mascota un cepillado para eliminar el pelo muerto y los nudos. Luego, mételo en una bañera llena con medio metro más o menos de agua tibia y termina de mojarlo con el cabezal de la ducha.
- Procura no echarle agua directamente en los oídos, ojos o nariz. Ponle champú y masajea suavemente pero a conciencia desde la cabeza hasta la cola, aclara y repite si fuera necesario.
- Es mejor usar champú formulado para mascotas. Los de persona no son tóxicos para los animales pero algunos pueden contener fragancias u otras sustancias que irriten su piel.
- Algunos cachorros ven el momento del baño como la oportunidad perfecta para hacer travesuras. Los más pequeñitos se mueven todo el rato y pueden arañar sin querer.
- Si has observado el mismo comportamiento en tu mascota, prueba a poner un juguete flotante en la bañera para que focalice su atención en él y no liarla parda.
- Regula la temperatura del agua para que esté tibia. Los perros son sensibles al agua caliente.
- No bañes en el exterior si hace frío porque podría enfermar. Sobre todo si es un perro de raza de pequeño tamaño. Si el clima es cálido podrás hacerlo.
- Aprovecha la ocasión para cortarle las uñas. Hazlo antes del baño para que así no pueda arañarte si se asusta.
¡BUENA SUERTE!
