Como sabemos, el coronavirus es potencialmente mortal tan solo para determinados grupos de riesgo, que se definen en función de la edad y de que padezcan enfermedades previas. Según las estadísticas, el 80,9% de los casos son leves y superan sin ningún problema la enfermedad pero es potencialmente peligroso en personas mayores de 80 años o con otras dolencias o defensas bajas.
Aumentar las defensas de nuestro organismo debe estar en nuestra lista de prioridades con la llegada del otoño. Debemos reforzar nuestro sistema inmunológico para asegurarnos que afrontamos con fuerzas suficientes el cambio de temperaturas y el frío del invierno.
Son muchos los alimentos naturales que pueden ayudar a fortalecer la línea de defensa del organismo. Algunas recomendaciones en este sentido son:
- Incluir en la dieta hierbas naturales y especias como ajo, cebolla, kión, orégano y cúrcuma.
- Consumir alimentos ricos en vitamina A y betacarotenos: camote, zapallo, zanahoria, papaya, etc.
- Alimentos con vitamina C: cítricos (naranja, mandarina, fresas, arándanos), pimientos, brócoli, kiwi, aguaymanto
- El zinc es clave para nuestro sistema de defensas. Lo podemos encontrar en semillas de calabaza (las puedes incluir en tu avena o ensaladas), frutos secos y menestras
- Pasar al menos 30 min al sol cada día con ropa clara o descubierta, para producir vitamina D. En el caso de que no puedas hacerlo, debes evaluar la toma de un suplemento según tus requerimientos por edad y sexo.
- Consume alimentos ricos en fibra, un componente muy importante que interviene en la función del sistema inmunitario promoviendo el crecimiento de tu flora bacteriana
- Puedes elegir alimentos con probióticos, es decir, bacterias con diversos efectos benéficos sobre el sistema inmune. Los encuentras en algunos yogures.
- Evita el alcohol, el azúcar y la comida procesada como empacados, comida rápida, frituras, etc.
Además de una alimentación saludable, existen otros hábitos que pueden tener una influencia muy positiva en lo que a la salud del sistema inmunológico se refiere. En resumen, los consejos para mantenernos más protegidos son:
- Lavarse las manos de forma adecuada y frecuente
- Hacer actividad física moderada
- Procurar tener un sueño reparador
- Manejar el estrés para evitar bajar las defensas
- Evitar los lugares muy concurridos
- No consumir azúcar, comida procesada y/o rápida, ni grasas trans
- Consumir diariamente frutas y verduras
¡A protegerse!