Muchos recomiendan que lo primero tomes antes de iniciar tu día sea agua. Y para incrementar sus beneficios, exprime en cada vaso o taza medio limón y no le añadas nunca azúcar. Bébelo a primera hora de la mañana y en ayunas.
Una de las razones es por que cada mañana al despertarte, tus tejidos corporales se encuentran en cierta medida deshidratados y es por ello que requieren de la ingesta de líquidos como agua para hidratar y rejuvenecer las células, al tiempo que eliminas las toxinas.
Un vaso o una taza de agua tibia con limón y en ayunas no sólo ayuda a quitar la sed con mayor rapidez que cualquier otra bebida, sino que además contiene numerosas vitaminas y minerales sumamente beneficiosos para tu organismo.
Algunos de los beneficios que muchos especialistas mencionan son los siguientes:
- Ayuda a la digestión
- Estimula tu sistema inmunitario
- Ayuda a quemar grasa
- Limpia tu piel
- Proporciona energía
- Depura tu cuerpo
Sin embargo hay quienes dicen que no es bueno hacerlo, ya que al ser un producto claramente ácido, si tenemos tendencia a sufrir problemas de acidez o padecemos un principio de úlcera gástrica, podemos acentuar estos problemas, dado el bajo pH del zumo.
Por otro lado, no está demostrado que mejoren la calidad de nuestra piel ni que estimulen la síntesis de colágeno dérmico; en cuanto al aporte de vitamina C, si bien es correcto, las cantidades que aportan no cubren el mínimo diario.
Y entonces… ¿lo tomamos o no? Pues en realidad el único beneficio demostrable, por obvio, de tomarse un vaso de agua tibia recién levantados es la hidratación que comporta el agua, con o sin limón,
