Desde el comienzo de los tiempos, se ha vinculado a la Luna con los cambios en nuestro estado de ánimo y comportamiento. Y con el tiempo, varios estudios han encontrado vínculos entre el ciclo lunar y la cantidad de emergencias psiquiátricas. Además, últimamente parece moda echarle la culpa a la Luna por nuestros cambios de humor y coincidencias en la vida.
Pero ¿puede realmente la Luna afectar tu estado de ánimo y comportamiento? Según algunas investigaciones y expertos ¡Sí es posible!, esto gracias a esa conexión profunda y antigua con la luna.
En el pasado, las lunas llenas eran tiempos de actividad social, mientras que bajo la oscuridad de la Luna nueva, íbamos hacia adentro y nos quedamos en nuestros hogares para reflexionar. Seguramente alguna vez has notado que eres más sociable durante las lunas llenas y más ermitaño durante las lunas nuevas, y es por eso; la energía de la Luna también amplifica nuestras emociones, como una marea. Cuando es Luna llena, puede sacar a la superficie nuestras emociones, y cuando hay luna nueva, es hora de estar más calmado y reflexivo.
Pero no se trata de culpar a la Luna por las emociones negativas o intensas, sino de agradecerle que las cosas están saliendo, para poderlas ver y enfrentar. Si eres de los que cree que cada mes es una montaña rusa, aquí te decimos qué pasa conforme cambia la Luna.
