La compañía británica Compass Pools está llamando la atención del mundo tras presentar su más reciente y ambicioso proyecto, que más que un rascacielos con piscina, sería una piscina con un rascacielos debajo.
A una piscina infinita se le conoce así cuando produce un efecto visual y pareciera que el agua se extiende hasta el horizonte o desaparece. El agua se extiende hasta el infinito, de ahí su nombre.
Suelen ser más costosas que una piscina tradicional porque requieren una estructura mecánica. Es importante que estén diseñadas con base en la ingeniería hidráulica apropiada y se mantengan en constante revisión y mantenimiento.
El proyecto busca construir en Londres el ‘Infinity London Tower’, un rascacielos de 220 metros de altura y 55 plantas que ofrecería oficinas, locales comerciales, restaurantes y en la parte superior un hotel de cinco estrellas, el cual estaría coronado por esta piscina infinita.
¿Cómo será?
- Las paredes serán transparentes, para que la vista sea segura sin importar si uno está debajo o sobre del agua.
- Estará en la cima de un edificio de 220 metros de altura: nada más y nada menos que 55 pisos sobre la tierra.
- Tendrá una capacidad para 600,000 litros.
- No estará hecha de vidrio, sino más bien de acrílico fundido para que “las aguas se vean perfectamente transparentes”. La compañía asegura que este material, produce ondas de luz en una longitud muy parecida a las del agua.
- El acceso será por una escalera de caracol giratoria localizada justo debajo de la misma.
Suena impresionante, pero tendremos que poner los pies en la tierra ya que ahora mismo es sólo un concepto en etapa de planificación.